La terapia hormonal es un tratamiento para los tipos de cáncer que dependen de las hormonas para crecer. Este tipo de tratamiento bloquea o altera las hormonas, lo que provoca que el crecimiento de la enfermedad se desacelere o se detenga por completo.
¿Para qué funciona la terapia hormonal?
La terapia hormonal tiene varias funciones según el tipo de tratamiento que se utilice. Entre ellas están:
- Evitar que el cuerpo produzca las hormonas que ‘alimentan’ el cáncer
- Prevenir la adherencia de las hormonas a las células cancerosas
- Modificar la función de las hormonas para que estas no funcionen como deberían
De esta manera, la terapia es efectiva para:
- Aliviar los síntomas relacionados con la enfermedad
- Desacelerar o detener el crecimiento del cáncer
- Evitar o reducir el riesgo de recurrencia
Tipos de cáncer en los que se utiliza
Aunque la terapia hormonal se puede utilizar para diferentes tipos de cáncer, su uso es más común en el cáncer de próstata y el cáncer de seno, que son cánceres que utilizan hormonas para crecer.
Para estos dos tipos de cáncer el tratamiento puede ir desde inhibidores de hormonas hasta la extirpación de los ovarios o testículos, órganos responsables de la producción de hormonas sexuales.
La terapia hormonal también puede utilizarse para tratar el cáncer de endometrio y el cáncer suprarrenal.
Tipos de terapia hormonal
El tipo de terapia hormonal empleada dependerá del tipo de cáncer diagnosticado y de su etapa. Entre los tratamientos disponibles se encuentran:
- Medicamentos orales – píldoras, cápsulas o líquidos que se toman en casa.
- Medicamentos inyectables – inyecciones intramusculares o subcutáneas administradas en el brazo, pierna, cadera o abdomen. Estas inyecciones se aplican en el centro de tratamiento o se puede enseñar a los pacientes o cuidadores a aplicarlas.
- Cirugía – se utiliza principalmente para el cáncer de próstata o de seno, y consiste en extirpar las fuentes principales de generación de hormonas (testículos u ovarios).
En el caso de los medicamentos, la frecuencia dependerá del tipo de medicamento y del cáncer a tratar. Si se trata de cirugía, es un tratamiento único y no requerirá medicamentos de seguimiento.
Su uso junto a otros tratamientos de cáncer
La terapia hormonal se puede combinar con otros tratamientos para cumplir diferentes funciones:
- Antes de la cirugía o la radioterapia, para disminuir el tamaño de los tumores (terapia neoadyuvante).
- Como tratamiento posterior para reducir el riesgo de recurrencia del cáncer (terapia adyuvante).
- Para eliminar las células cancerosas que han regresado o se han propagado a otras partes del cuerpo (metástasis o enfermedad en recaída).
Efectos secundarios
Ya que la función principal de la terapia hormonal es bloquear o interferir con las funciones de las hormonas que produce el cuerpo, los efectos secundarios son inevitables. Estos, como cualquier otro tratamiento contra el cáncer, dependen del tipo de terapia hormonal y de la reacción del cuerpo al tratamiento. En este tipo de terapia los efectos secundarios también varían según el sexo del paciente.
Algunos de los efectos secundarios comunes son:
- Sofocos
- Falta de interés sexual
- Debilidad en los huesos
- Diarreas
- Nauseas
- Cambios de ánimo
- Fatiga
- Senos agrandados o sensibles
- Cambios en la menstruación a las personas que no le ha llegado la menopausia
Las personas transgénero y la terapia hormonal
La terapia hormonal para tratar el cáncer puede afectar la transición de las personas transgénero. Si esta es tu situación, es importante que dialogues con tu equipo médico sobre los efectos del tratamiento.
Conclusión
La terapia hormonal se posiciona como uno de los tratamientos más recomendables para ciertos tipos de cáncer debido a su capacidad para reducir, eliminar y desacelerar el crecimiento de las células cancerosas. A pesar de sus efectos secundarios, esta terapia continúa siendo una opción viable con altos porcentajes de eficacia.
Como con cualquier otro tratamiento, existen efectos secundarios que deben discutirse con el equipo médico, ya que estos dependen de varios factores. Asimismo, es importante buscar información en fuentes confiables y aclarar cualquier duda o pregunta con el personal médico.